Tabla de contenido
Aproveche al máximo las fresas en este postre rápido, con una sedosa capa de mascarpone complementada con una compota ácida, galletas de jengibre crujientes y pistachos.
Preparación: 20 minutos
Cocinar:5 minutos
Fácil
Sirve para 4 – 5 personas
ingredientes
– 500 g de fresas, descascarilladas y cortadas por la mitad, las más grandes cortadas en cuartos
– 1 limón, pelado y exprimido
– 100 g de azúcar en polvo
– 150 ml de mascarpone
– 300 ml de nata doble
– 1 cucharada de pasta de vainilla
Para servir
– 4 galletas de jengibre, trituradas
– un pequeño puñado de pistachos, picados (opcional)
– Fresas liofilizadas, trituradas (opcional)
Método
PASO 1
Poner las fresas, el zumo de limón, el azúcar y 2 cucharadas de agua en una sartén grande a fuego medio y cocinar durante 5 minutos hasta que la fruta se haya ablandado. Pásala a un bol y déjala enfriar. Poner 300g de la mezcla en una batidora (reservar el resto para más tarde), batir hasta que quede suave y colar en una jarra.
PASO 2
Batir el mascarpone en un bol grande para que se ablande, luego añadir la nata doble, la pasta de vainilla y la ralladura de limón, y batir de nuevo hasta que empiece a espesar. Incorpore el puré de fresas triturado y tamizado para combinarlo; se espesará un poco más. Como alternativa, se puede mezclar para tener capas de compota a través de la mousse, que se mantendrá refrigerada hasta un día.
PASO 3
Colocar la mousse en vasos de cristal con una cuchara o con un tubo y cubrirla con la compota de fresas reservada, las migas de galletas de jengibre, los pistachos y las fresas secas, si se desea.
¡Disfruta!