El hojaldre de kéfir es una receta rústica ideal para servir como sustituto del pan o como un sabroso tentempié que se puede degustar con embutidos, quesos o pastas dulces. Su punto fuerte es su sencillez, que lo hace versátil y fácil de combinar con cualquier plato. Crujiente, dorado y lleno de sabor: descubra cómo prepararlo en pocos minutos sin necesidad de levantarlo.
Ingredientes de hojaldre de Kéfir
- 400 g de harina 00
- 150 g de kéfir de leche
- 150 ml de leche entera
- 2 cucharaditas de bicarbonato de sodio
- 1 cucharadita de sal fina
- Una pizca de mantequilla derretida para la masa
Preparación
- Tamizar la harina en un bol e incorporar la sal fina y la leche. Mezclar el bicarbonato de sodio con el kéfir (juntos actúan como agente leudante) y añadirlos a la harina.
- Amasar la masa hasta que esté suave y elástica. Dividirla en cuatro partes y extender cada una de ellas con un rodillo para obtener cuatro finas láminas rectangulares.
- Superponga las cuatro hojas de hojaldre, untando cada capa con mantequilla derretida, y vuelva a extender la masa con un rodillo para adelgazarla más.
- Enrollar la masa, empezando por el lado más largo, y luego darle forma de caracol.
- Vuelva a extenderla con el rodillo para nivelarla y adelgazarla, luego colóquela en una bandeja de horno forrada con papel de hornear y hornéela durante 25 minutos a 180°. Servir caliente.