La Navidad está a la vuelta de la esquina, y si tiene previsto recibir invitados para comer o cenar, seguro que ya tiene preparado su menú de fiesta. Si quiere añadir un toque extra de clase, un buffet es la mejor solución. Incluso para una velada tranquila en compañía de amigos, los entremeses navideños son una alternativa ideal a una comida más sustanciosa y posiblemente pesada.
Sólo hacen falta algunos trucos para crear un ambiente elegante y acogedor, para disfrutar con sencillez con nuestros seres queridos.
Los entremeses de la Navidad: los grandes clásicos
Durante las fiestas, está bien romper las reglas y disfrutar de la buena comida en grandes cantidades. El elemento ineludible de toda mesa en estas ocasiones son los entremeses navideños. Preparados como preludio de la comida o en forma de buffet, siempre son los favoritos de todos los invitados.
Por supuesto, hay algunos clásicos que no pueden faltar en nuestras mesas, empezando por los cócteles de gambas en salsa rosa. Servidos en pequeños cuencos, son la mejor manera de empezar. Si queremos seguir con el tema de los entrantes navideños de pescado, podemos añadir vieiras gratinadas.
Además, siempre podemos contar con los mejillones, las ostras y el salmón ahumado; acompañándolo con canapés o pan tostado será seguramente el rey de la mesa.
Inevitable en nuestros hogares en esta época del año, el panettone gastronómico es un clásico fácil de recrear. Basta con cortar el panettone salado en muchas rebanadas, rellenas con diferentes ingredientes según su gusto. No nos olvidemos de la ensaladilla rusa, el entrante navideño frío por excelencia. Añada un plato de paté de hígado y nuestra mesa de antipasti será perfecta.
Bufetes alternativos
Si, por el contrario, queremos probar algo nuevo, sobre todo para los invitados que no consumen productos animales, una gran idea es preparar un buffet vegetariano. Rápidos y fáciles de cocinar, los entremeses navideños vegetarianos son tan buenos que incluso los amantes de la carne los disfrutarán. Empezando por el hojaldre: relleno de espinacas, pimientos mezclados, queso ricotta y mucho más. Como siempre, podemos hacer una buena tarta salada según los gustos de nuestros invitados. También podemos centrarnos en las sabrosas albóndigas de berenjena, las tortitas de coliflor y las pizzas clásicas.
Sin embargo, la Navidad también es una fiesta para los anfitriones, y si no quieres pasar todo el tiempo en la cocina, hay otros entrantes más rápidos y baratos de preparar. También en este caso, el hojaldre será nuestro principal ayudante: basta con rellenarlo con un poco de jamón y queso. Luego, al retorcer el hojaldre, habremos creado unas empanadas; bonitas a la vista y excelentes al gusto.
La Navidad es también la época de la polenta: creando bolitas con un corazón de queso Brie y calentándolas en el horno, obtendremos un aperitivo rústico y delicioso. Y no olvidemos los huevos cocidos, quizá servidos con un poco de ensalada rusa, y los ñoquis fritos. Acompáñalos con embutidos y quesos, y el buffet navideño será perfecto.