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Un evento que resuena en el corazón de Donostia
El próximo lunes 20 de enero, la ciudad de San Sebastián se vestirá de gala para celebrar la emblemática Tamborrada, una de las festividades más esperadas del año. Durante 24 horas, las calles se llenarán de ritmo y color, mientras diversas compañías de tambores y barriles desfilan tocando marchas que rinden homenaje a su patrón.
Esta celebración, que tiene sus raíces en el siglo XIX, es un verdadero símbolo de la identidad donostiarra y atrae a miles de visitantes cada año.
Gastronomía: el alma de la fiesta
En un día de festejos como este, la gastronomía juega un papel fundamental. San Sebastián es conocida por ser la ciudad con más estrellas Michelin per cápita del mundo, lo que la convierte en un paraíso para los amantes de la buena comida. Entre los muchos lugares que ofrecen delicias culinarias, destaca Txepetxa, un bar que ha conquistado el paladar de los más exigentes, incluido el famoso chef Martín Berasategui. Este establecimiento ha sido apodado «La Capilla Sixtina de la anchoa» por su dedicación y maestría en la preparación de pintxos.
La historia detrás de los pintxos de Txepetxa
La historia de Txepetxa se remonta a más de un siglo, cuando la abuela de Manu Marañón, actual propietario, comenzó a trabajar con anchoas en Zarautz. Con el tiempo, su familia perfeccionó las recetas de marinado, dedicando 40 años a experimentar hasta encontrar la combinación perfecta que ha enamorado a generaciones de comensales. Se dice que la receta original de sus famosas antxoas marinadas está guardada en una caja fuerte, un secreto que ha contribuido a su éxito en múltiples concursos gastronómicos.
Un lugar de encuentro para celebridades y amantes de la gastronomía
Txepetxa no solo ha sido reconocido con premios como el Solete de la Guía Repsol, sino que también ha atraído a numerosas personalidades del mundo del espectáculo y la gastronomía, como Ferran Adrià y Glenn Close. Su pintxo más emblemático, el de txepetxas, combina sabores únicos que incluyen crema de centollo, huevas de salmón y foie, entre otros. Cada bocado es una explosión de sabor que invita a regresar una y otra vez, convirtiendo cada visita en una experiencia inolvidable.
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