Esta planta hará que tus platos sean aún más sabrosos: estamos hablando de las bayas de enebro.
Bayas de enebro
Se trata de pequeñas frutas que provienen de la familia «cupressaceae». Su forma es esférica de aproximadamente de 7 a 9 milímetros de diámetro.
Son de color azul oscuro, teñidos con tonos morados, cubiertos con una especie de piel blanquecina. La pulpa es roja, y en su interior están escondidas pequeñas semillas, alargadas y muy duras.
El aroma que propaga es único y el sabor, al principio es dulce, luego amargo, resaltando la esencia de una amplia variedad de alimentos.
Se utilizan muy a menudo como aromatizantes en la cocina, precisamente por el aceite esencial que poseen, sin embargo, también se utilizan en la fitoterapia, o en medicina, dadas las excelentes propiedades balsámicas, digestivas y diuréticas, utilizando el extracto acuoso en infusión.
Úsalos en la cocina
Las bayas de enebro se prestan para sazonar carnes como despojos, hígado, intestinos, corazones, y pulmones. Son perfectos para carnes negras, es decir, como el jabalí, el ciervo, y el pato.
Un secreto: retiralos antes de servir, porque no son una verdadera hierba aromática. De hecho, su consistencia es dura y tienden a desmoronarse, incluso tienen la misma función que el perejil, los cebollinos o la albahaca: deben usarse de manera diferente.
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